Parece que va a llover

Natalia Pastor


Con la colaboración de la galería Guillermina Caicoya


Del 10 de junio al 27 de julio 2022

Sala 1

Entada libre y gratuita hasta completar el aforo

gobiernu del principau dasturies

 

 


La Cuenca Minera del Nalón es el territorio en el que se desarrollan los últimos proyectos artísticos de Natalia Pastor. La artista trabaja habitualmente en series, cuyo proceso de investigación se prolonga durante años, documentando mediante fotografías y vídeos la lenta transformación del paisaje de la Cuenca Minera del Nalón, lugar en el que reside y trabaja. Ello le ha permitido vivir las consecuencias y el impacto que la reconversión y el proceso de desindustrialización ha tenido en la configuración del paisaje y la identidad de una sociedad que, ha ido pasando por fases de florecimiento y riqueza, hasta llegar a la actual situación de decadencia.

 

Desde este escenario, la artista ha ido desarrollando varios proyectos que, desde planteamientos formales distintos, confluyen conceptualmente en una visión del territorio que oscila entre el testimonio, el documento, la mirada idealizada y lo épico.

 

 

Las fotografías, documentan el paisaje de La Cuenca del Nalón, especialmente de las viviendas de planta baja y las barriadas obreras.

Una parte del proyecto, se estructura en series temáticas con fotografías de carboneras, ropa tendida, medianeras, pintadas y casas de azulejos y gresite. La propuesta de montaje para estas series es una disposición lineal de imágenes fotográficas, a modo de estratos o capas, que aluden al amontonamiento y apariencia de caos que se percibe en la disposición urbanística de algunas zonas. Un paisaje construido con el conglomerado de elementos sacados de contexto, que configuran la identidad colectiva a partir del fragmento.

 

La otra parte, consta de una serie fotográfica con imágenes de mayor tamaño, 80 x 120 cm, que se centra especialmente en el barrio de Pénjamo, la barriada, las piscinas y los talleres que forman parte del pasado industrial de la zona, en el antiguo centro de Formación Profesional El Politécnico, que hoy en día es el IES Cuenca del Nalón.

 

Las piscinas forman parte del Parque Deportivo de La Felguera, proyectado en 1963 por el arquitecto Enrique Álvarez-Sala Morís para la Obra sindical de Hogar y Arquitectura. El edificio principal tiene un notable interés arquitectónico de estilo moderno, constaba de terrazas y miradores, gradería, cafetería, gimnasio, vestuarios, piscina climatizada y piscina exterior, con una amplia zona verde para los bañistas. En 1985 se construyeron una pista polideportiva y dos pistas de tenis.  Este complejo deportivo recibía miles de visitantes en los meses de verano y la instalación climatizada, así como las pistas, eran utilizadas durante todo el año. Hoy en día, estas instalaciones se encuentran abandonadas y han sido saqueadas en múltiples ocasiones. La fotografía tomada en 2014 y las realizadas en 2020 muestran claramente el alto grado de deterioro que han alcanzado las instalaciones durante los últimos años.

Por otra parte, el IES Cuenca del Nalón, tiene una larga historia, vinculada a la Sociedad Metalúrgica Duro Felguera y la Escuela de Maestría Industrial. En 1963 se inauguró un nuevo edificio en la calle Conde Sizzo y en 1974, con la Ley General de Educación pasa a ser clasificado como Centro Nacional de Formación Profesional de Primero y Segundo Grado. En 1977 se convierte en Instituto Politécnico Nacional, con las nuevas dependencias en terrenos de La Pomar y en 1997, el Centro adquiere la actual denominación de IES Cuenca del Nalón.

 

Parece que va a llover, pone de relieve la transformación permanente del paisaje tanto urbano como social de La Cuenca Minera del Nalón, a través de una instalación que incluye fotografías y proyecciones de vídeo, desde una visión que plantea una historia fragmentada, entre el documento y la mirada interiorizada del paisaje, entre los componentes míticos del imaginario colectivo y las múltiples Fedoras * que constituyen las ciudades y los deseos.

 

* Las ciudades invisibles.  Las ciudades y el deseo (Fedora). Italo Calvino

 

 

Natalia Pastor

Pola de Laviana (Asturias), 1970

 

Natalia Pastor es licenciada en Bellas Artes por la Universidad del País Vasco en las especialidades de Audiovisuales (1993) y Pintura (1995).

 

Artista interdisciplinar, emplea diferentes técnicas, medios y soportes en sus creaciones. Proveniente de gestos y actitudes propios de los discursos herederos de los postulados feministas, comenzando en los roles propios del género, la obra de esta creadora ha evolucionado hacia aspectos formales más sofisticados, sin perder de vista ciertas realidades muy próximas al desarrollo de la geografía personal, fruto de su entorno social, de estructuras marcadas por la industria, las reconversiones, la riqueza y decadencia de su lugar de residencia, ubicada en plena cuenca minera, con todo lo que ello tiene de significado.

La serie Dérmicos, en la que siluetas rojas de mujeres levitan sobre el paisaje industrial y los fondos de chimeneas y factorías como metáfora de la lucha contra la decadencia de un territorio sometido a la tensión e incertidumbre, da paso a series de dibujos con un discurso más cercano a las vivencias personales, abordando en su obra la influencia del territorio y el espacio público en la configuración de nuestro espacio privado y nuestra identidad. 

 

Ha realizado intervenciones e instalaciones en espacios públicos y participado en diversos Encuentros Internacionales de Arte: Instalación site-specific para la Capilla de los Dolores de Grado (Extensiones-Anclajes de Laboral Centro de Arte y Creación Industrial, Gijón, 2007), Artransmedia 2002, Fundación Danae, Universidad Laboral, Gijón (2002), Naturaleza, Utopías y Realidades, Teror, Gran Canaria (2001), “Paraíso Zero”. Uppsala International Contemporary Art Binnial Eventa 5. Suecia. (2000), Diáspora. Encuentro Internacional de Arte Ciudad de Oviedo, Asturias (1999) Holzjagd Internationales Symposium Weikersheim, Alemania (1994). Tiene varias exposiciones individuales y ha participado en numerosas exposiciones colectivas y talleres.

 

Su obra plástica está presente en colecciones institucionales como la Junta General del Principado y el Museo de Bellas Artes de Asturias, la Pinacoteca de Langreo, el Ayuntamiento de Valdés, la Diputación Foral de Bizkaia, colección Studiolo, colección DKV.

 

Ha recibido diversos premios y becas. Entre otros, fue Artista joven revelación del año en Asturias en 2001, ha recibido el VII Premio de Pintura de la Junta General del Principado de Asturias y en la XIII Bienal de Pintura “La Carbonera” en 2005 y el Premio Ayuntamiento de Valdés del XL Certamen Nacional de Arte de Luarca. Es artista de la Galería Guillermina Caicoya Art Projects y ha participado en distintas Ferias de Arte con la misma.